El 5 de talleres.

De aquellas películas muy especiales denominaré EL 5 DE TALLERES. Al principio quería verla única y exclusivamente porque confieso que me encanta mucho, muchísimo, Esteban Lamothe, es un argentino, un hombre hermoso y además encantador, buen actor, simpático a la pantalla. Después comencé a ver la historia y sentí que se pondría terrible, vicisitudes de la vida normal y no me sentí capaz de echármela al hilo y quedar reventada de alma y corazón. Entonces fui viéndola de pedazos hasta que de pronto el pedazo se alargó, alargó alargó, hasta que la llegué -sin respirar (casi)-, hasta el final.

Es una historia muy sencilla, creo que cuando la miré por primera vez debo haber estado hiper sensible por las conjeturas que tomé, onda entiendo no querer ver desgracias ajenas como si el mundo estuviera hermoso en cada esquina, pero digamos que la trama tiene el cuidado o más bien dicho, el director tuvo el cuidado de contarla de forma tal, que podría tener un final desgarrador, pero donde justamente lo que salva, los salva y al espectador entre ellos, es la hermosa relación de amor, compañerismo, amistad, solidaridad, bancarse a la vena, que existe entre la pareja de Patón (Lamothe) y Ale (Julieta Zylberberg) su mujer. Porque la historia es así, Patón está por cumplir 35 años y siente que ya está viejo para seguir en el fútbol, que ha sido la razón de su vida. Es el capitán de un club de la primera C Argentina: Talleres y está comprendiendo que esto no puede continuar mucho tiempo más. Entonces deberá decidir dejar lo que ha sido vida y pasión y tomar camino por otra parte, otra vía. Y nada de esto podría ser o esta historia habría sido un dramón oscuro y terrible, si no ha sido por la brillante idea de su director, Adrián Biniez, que decidió tomar el amor como la mejor salvación para los seres humanos. Y no es una oda al hipismo, ni cosa parecida, tan solo es la verdad.

Y me gustó porque cuando recién la grabé y busqué de ella, me enteré que Esteban Lamothe y Julieta Zylberberg, se conocieron en esta cinta y terminaron juntos, porque realmente creo que ambos tendrían que haber sido personas muy extrañas si esto no hubiera sucedido, ya que durante toda la trama, entre ellos existía una química, una unidad que realmente traspasaba la pantalla. No sería raro que se enamoraran después de EL 5 DE TALLERES. De echo, puedo confesar que es la primera vez que me identifico tanto con ambos protagonistas, súper delirante, pero saco de los dos un poquito y me convierto en ellos. Me enamoré mucho de ese amor bueno, sincero, solidario, cálido, amoroso, amistoso, tierno y a la vez lúdico, sexual y sensual que tenían.
Porque el asunto es que Patón, decide retirarse del fútbol, pero no hay nada en el mundo para él, nada mucho por hacer, o peor aún nada mucho que él sepa hacer, en parte porque no terminó el secundario (colegio), debe rendir diez materias para lograrlo, es bien burro (no soy solo yo la que dice que los futbolistas sólo saben perseguir pelotas). Lo que será trabajar duro para pasar esas materias y realmente nada de eso sería posible, sin la presencia y ayuda de su mujer, Ale.

Creo que EL 5 DE TALLERES, es una interesante forma de contar una hermosa historia de amor del siglo XXI. Me gustó realmente mucho, en varias oportunidades desde un punto de vista al revés, me sentí tan interpretada, al revés porque no tengo nada como ellos, ni pareja ni nadie, pero al derecho, porque de lograr alcanzar algo, quisiera que fuera algo como lo de ellos, ser ella con un él o ser él con una ella. No me cierro a nada. 
Y como buena cinta de cine alternativo (o falto de recursos económicos), fuera de Lamothe y Zylberberg, el resto del reparto son actores bastante desconocidos, onda secundarios, que por supuesto hacen el aguante entre todos, sin brillar ninguno como estrella o figurín, haciendo de la historia algo tan real, tan de la vida de todos los días, existencias en las que uno se ve reflejado totalmente. Y eso tan solo se puede alcanzar cuando estás frente a un puñado de buenísimos actores. Y si de repente, le pasa como a mí, que no entiende el título de la cinta, le cuento: 5 porque es el número que ostenta Patón en su camiseta, además de ser el capitán del equipo y Talleres, es el nombre del mismo. Jajaja si no entendió a la primera es como yo, no cacha (entiende) nada de fútbol, pero qué tanto.
Totalmente recomendada!!

SINOPSIS:
Patón Bonassiolle, capitán de un club de fútbol de la primera C Argentina, se da cuenta de que su carrera futbolística ha llegado a su fin. A los 35 años, sin fama ni fortuna, deber enfrentar el mundo real junto con su novia Ale.

CALIFICACION:
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FICHA TECNICA:
Título original: El 5 de talleres, Argentina, 2014.
Dirección y guión: Adrián Biniez.
Fotografía: Guillermo Nieto.
Música: Adrián Biniez, Sebastián del Muro.
Dirección de arte: Gonzalo Delgado
Reparto: Esteban Lamothe,  Julieta Zylberberg, Cesar Bordón,  Néstor Guzinni, Matías Castelli, Alfonso Tort , Luis Martínez.