29 de septiembre de 2015

Ripper Street.



Amo estas series de TV inglesas, que de tanto en tanto trasmiten por Film&Arts, odio en cambio, que tengan tan poca constancia (los encargados de la señal) para hacer del placer algo continuo, porque después de cuatro u ocho capítulos, en los que uno está literalmente en la punta del asiento, los quitan y uno queda más que triste, emputecida y triste.

RIPPER STREET, tiene además de el plus de ser inglesa, que está hecha con responsabilidad, cuidado. Es un trabajo minucioso, creo que es de las pocas series que en una hora de duración, logran contar una historia con toda clase de detalles, conversaciones, acción, sangre, gloria, infierno, justicia y por tanto, uno siente que el tiempo transcurrido fue mucho más largo, pero no por lo aburrido, sino por la cantidad de situaciones que ocurren en ese lapsus de tiempo. Una serie que en cada uno de sus capítulos uno tiene por seguro que existirá mucha adrenalina, buenos actores, trama, acción, para mi gusto demasiada violencia, uno va metiéndose en cada historia (capítulo), que a su vez algunos van concadenándose con los siguientes, sobre todo en lo referente a los vínculos que se van armando y a veces también a que las secuelas dejadas como migajas en el suelo, por un asesino, continúan en el próximo capítulo.

La historia de RIPPER STREET, comienza con un supuesto nuevo episodio de "El Destripador", en el que la Division H, de East End, del barrio de Whitechapel, intentará resolver. Pero todo está en su contra, uno porque quien antes intentó hacerlo fue destituido y enviado a ocupar un cargo más bien burocrático y obsesionado con el tema, aparece y molesta, perturba el trabajo del nuevo equipo. Al tiempo de ese capítulo, descubriremos, que no se ha dicho todo con respecto al "destripador" y que lamentablemente mucho no se podrá hacer en materia de justicia, una porque las víctimas son las siempre mal miradas, pero bien usadas y saboreadas, prostitutas y segundo, porque el destripador en cuestión, al parecer, tiene lazos sólidos con la corona y bueno usted sabrá, que país con corona es pasar por alto cualquier cosa que esa gente haga, porque esa gente es sagrada. Después esa visión de las cosas, la heredarían los políticos y es por eso que el mundo no avanza.

Pero con lo que no contaban en Londres del siglo XIX, es con la presencia, combinada de justicia y rectitud del Detective Inspector Edmond Reid, que es de los pocos policías de alta jerarquía que no se anda con chiquitas, que es un paladín de la justicia en todos los buenos enfoques de la palabra. Un hombre justo, no por ello distante de la violencia, porque pucha que es violenta esta serie, equilibrado, sincero, noble, leal, además de guapo. No por nada el rol del Inspector Reid, está caracterizado por el siempre guapo y encantador, Mattew Macadafayen, mejor conocido como "Darcy" en "Orgullo y Prejuicio". Yo al menos después de esa película lo he amado sinceramente y como además de guapo es muy buen actor, siempre sabe adentrarse en el nuevo rol que actuara, ya sea de detective, de caballero, de pobre tipo, una poesía. 

Concentrémonos en RIPPER STREET, que con cada capítulo, en este caso ocho, deja realmente al espectador agotado pero feliz, impresionado, atrapado y después de un respiro, con ganas de más.
El domingo en la tarde de forma muy gratuita, comencé a ver uno de los cuatro capítulos que me quedaban, los cuales los tenía sinceramente atesorados para alguna vez, porque son tan buenos y no volví a verlos anunciados, que no quería terminaran. Entonces los administré y administré, pasaron los meses, sacaron la serie de la programación de Film&Arts y yo seguía con ellos. Y el domingo no pude más. Comencé con una, respiré y seguí con la otra, la otra, hasta que el misterio creció tanto que tuve que ver el último y octavo capítulo, quedar completamente ensoñada y después asumir con tristeza que el non stop de RIPPER STREET habia concluido. 

En cada uno de los ocho capitulos que a mí me tocó ver, uno va desentrañando distintos tipos de situaciones. El primero comienza con el misterio de un supuesto Destripador de Londres, que todo indica que si pero que hay demasiada gente de las altas esferas a su alrededor y las muertes quedan sin justicia. Y de ahí en más la variedad de historias, puntos de vista, miradas, tramas, que se irán desarrollando en los próximos otros siete capítulos, les juro que los dejará patitiesos de emoción. Todos apasionantes, realmente desbordantes de adrenalina, muy bien armadas las historias, todas con trama, misterios que van saliendo a la luz, vínculos que se van estrechando y otros separando.

Debo destacar las actuaciones de mi amado Matthew Macdafyen, Jerome Flynn y Adam Rothenberg, que forman el equipo central de la División H, del barrio de Whitchapel, en East End, Inglaterra. Por orden de aparición, el Detective Inspector Edmond Reid, el sargento capitán Bennet Drake y el capitán y medico estadounidense, Hommer Jackson. 
El detective inspector, por lo que vamos viendo a medida que los capítulos avanzan, es prácticamente un visionario de la investigación ya que crea su propio Centro de Investigación Criminológicas (CSI), aunque primitivo será de lo más eficiente para poder resolver los crímenes a los que se enfrentan. También hay que decir que el Detective inspector, Reid, carga con un pasado que lo atormenta y se lo recuerda cada que se desnuda y contempla la mitad de su cuerpo quemado. Todo indica que hubo un suceso del que poco se habla, donde además perdió a su única hija. Después sabremos que fue en altamar, cuando el barco en el que viajaban naufragó. De alguna forma, en su rectitud absoluta, con el paso de los capítulos, vamos viendo que esto lo obsesiona, porque tiene el palpito que su hija está viva en alguna parte y que quizás con cada caso, logré en algún momento llegar a ella. 

Hommer Jackson, médico norteamericano y antiguo miembro de la Agencia Pikerton, que viene huyendo desde Chicago, Estados Unidos, con varios secretos en la espalda, además de ser acompañado por una hermosa mujer, todo indica "su mujer", aunque en el nuevo rol laboral, de administrar una casa de prostitutas, él se entretenga en la afanosa labor de probar y calificar a cada una de las doncellas que llegan a trabajar con ellos. A raíz de eso y otras situaciones que iremos viendo en el avance de la serie, Jackson, no es un trigo muy limpio, pero es un muy buen médico forense y eso el Inspector Reid, lo descubre al poco andar, ya que parece que él también sabe de esas cosas, entonces un poco para protegerlo, otro poco obligado, lo invita a trabajar (sin posibilidad de negarse) en la instalación de lujo que instalan en la comisaria, para que el doctor tenga su sala de autopsias con todas las comodidades, herramientas, utensilios y productos para realizar su labor. Lo cual, marca un precedente en la forma que esta comisaría resuelve los casos. 

Y por último, el musculoso del grupo, el Sargento Drake, un hombre de apariencia violenta que en realidad es un ser humano que arrastra con pesar y toda la dignidad que el alcohol le permite, sus años mozos en la guerra, defendiendo a la corona inglesa, por su rostro uno va descubriendo que el supuesto éxito, no se lo llevó precisamente él. Una suerte de auto flagelación, que descarga cada que puede, en los espacios de peleas no autorizados, que se arman de tanto en tanto en diversos sitios de la ciudad y donde Drake, siempre sale vencedor, fundamentalmente porque no está peleando con su adversario, sino contra la guerra, sus pesadillas, las caras que no deja de ver, los gritos que no deja de escuchar. Es feroz y al mismo tiempo, descubriremos que es un ser humano sensible, atormentado, tremendamente bueno y noble, además de justo. Estos roles respectivamente son interpretados por  Adam Rothenberg y Jerome Flynn, que frívolamente debo decir, sin ninguna vergüenza,que los invitaría junto a Macdafyen, a salir conmigo, sin dudarlo. Qué hombres mama mía, que hombres!! 

Realmente un ramillete de tres inmensos actores, diferentes, especiales, únicos y que juntos en la más "defensores por el bien", aúnan sus fuerzas y hacen que los malos, asesinos, secuestradores, mueran de miedo y los ciudadanos del barrio de Whitechapel, puedan vivir tranquilos. En este siglo XXI, necesitaríamos clonarlos por mil, si es que alguna vez se nos ocurre que la justicia existe para ejercerla, no solo para proteger a los más nefastos del universo.
Totalmente recomendada!!!


SINOPSIS:
Serie situada en el East End de Londres en 1889 durante los asesinatos de Jack el Destripador. La tristemente célebre División H - la comisaría de policía encargada de mantener el orden en el distrito de Whitechapel, está en un estado caótico tratando de mantener el orden después de una época turbulenta para Londres.

CALIFICACION:
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FICHA TECNICA:
Título original: Ripper Street, Reino Unido, 2012
Dirección: Andy Wilson, Colm McCarthy, Tom Shankland
Género: Serie TV intriga, policial, crimen.
Reparto: Matthew Macdafyen, Jerome Flynn, Adam Rothenberg, MyAnna Buring, Jonathan Barnwell, David Wilmot.

18 de septiembre de 2015

Entre caníbales.

A mediados del mes de mayo y gracias a mi sisterna Manucita, tuve a bien descubrir que en la señal FOX life (canal 29 Vtr), estaban dando la serie, unitario, argentina: ENTRE CANIBALES. La idea original es de Juan José Campanella y la dirección, que yo pensé que también estaba en sus manosl, en realidad estaba a cargo de otros tres chicos argentinos: (. Miguel Colom, Pablo Vasquez y Diego Sánchez)
El tema es que la serie para mi gusto, fue buenísima. Hablo en pasado porque lamentablemente terminó, de forma abrupta, el miércoles 15 de septiembre.
Ya que todo indica que nuevamente lo que yo opino, pienso, gusto, no es de paladar, mentalidad y parecer de la mayoría de las personas y esta serie, que es una co-producción de Telefe argentina y Foxlife, duró lamentablemente menos de lo planeado.

Desde que comencé a verla, la serie habia iniciado unos tres o cuatro capítulos antes. pero no me costó insertarme y la amé completamente. Tenía un ritmo, la ambientación, la trama, la historia, mayoría de los actores secundarios, que simplemente atrapabam. Iba en horario nocturno de 22  a 23 horas, lo que me hizo grabarlas para después pegarme un non stop el fin de semana, realmente soberbios.
La historia se centra en Ariana - Ángeles (Natalia Oreiro), quien hace veinte años atrás (1995) partió junto a su mejor amiga, Daniela, a estudiar a la universidad, a Ingeniero Márquez, una ciudad grande, ubicada dentro de la provincia de Neuquén. Las dos jóvenes lindas, provincianas, pero sobre todo lindas, rápidamente se introdujeron en la vida estudiantil y una noche, unos amigos las invitaron a bailar. Después fueron a dar un paseo por la playa, lugar en el que fueron interceptadas por cuatro jóvenes, total y absolutamente borrachos, chicos de la alta sociedad, los cuales las violaron salvajemente, además de dejar mal herida a Daniela, quién en el vaivén de las olas del mar, moriría ahogada.

Es así como veinte años después (2015), Ángeles vuelve a Ingeniero Márquez, decidida a cobrar venganza. De ahora en más su nombre será Ariana, su único contacto en Ingeniero Márquez, es el Padre, Martín Pirandello, quien la socorrió cuando la violación, ayudó, protegió y posteriormente, se haría cargo del bebé que Ángeles tuvo producto de la agresión sexual. En el camino de los que sufren injusticias, conocerá y asociará con Francisco, un ex juez a quién la ley le pasó por encima quitándole mujer e hijo, por lo que también está sediento de justicia o venganza y junto Ariana, armarán un plan para hacer justicia.

Los cuatro jóvenes identificados en esta violación, como pertenecen a las más altas esferas socio económicas de la zona, serán protegidos por el entonces Intendente de la ciudad, el señor Valmora. Manejando la situación de forma tal que la violación quede como un "incidente menor", la chica muerta y la propia Ángeles, absolutamente imposibilitadas de exigir justicia, a lo más como un par de mujeres fáciles y de este tema no se vuelve hablar nunca más. Es así como estos cuatro jóvenes continuarán con sus vidas, los que puedan estudiaran en la universidad, los que no trabajaran, pero el vínculo de mejores amigos se mantendrá intacto en el tiempo por siempre jamás.
Lo cuatro jóvenes se presume son: 
- Rafael Valmora, hijo del entonces Intendente y quien ahora ocupa el mismo puesto municipal. 
- Patita, un don nadie que los Valmora pusieron a cargo de los asuntos delictuales en la municipalidad, a sabiendas que si hay delito, él debe ser el culpable.
- Julito Castro, de familia clase media, patero (barbero) insoportable, con una pésima opinión de las mujeres, cuasi misoginio de aquellos, pero que escarbando encontraremos que su gran amor, es la prostituta que lo desvirgó a los 18 años, con quien a escondidas, vive una relación, desde aquellos viejos tiempos. Él también trabaja con Rafael Valmora en la intendencia.
- Luis Lemos Arenal, un hijito de papá, seudo abogado, aunque más bien lo suyo es el chanchuyo (malos pasos), robar, hacer trampas y más. También trabaja como consejero económico de Valmora en la Intendencia.
- Agustín Larralde, como es más joven no es estrictamente de los mejores amigos de Valmora, de hecho todo el mundo comenta, habla y sabe, que tanto el padre como el hijo Valmora, ayudaron a salir adelante a Larralde, internándolo en una clínica de rehabilitación, mandándolo a estudiar y después ofreciéndole un trabajo en la intendencia. De los grandes amigos de Vamora, Larralde, es el más inaparente, callado, introvertido del grupo.
Está usted en lo cierto, el número de personajes relatados es cinco no cuatro, lo que pasa es que durante mucho tiempo, en la serie, pensaremos o nos harán creer, que los violadores de las chicas, son los cuatro primero, pero a mitad de la tira, sabremos que Larralde en realidad ocupa el lugar de uno de ellos, porque los violadores son y serán solo cuatro. 
Como ya terminó la serie, no sé si puedan encontrarla repetida en www.youtube,com, quizás me puedo tomar algunas atribuciones como contarles el final jajajaja. Pero antes, vamos con los pros y contras de esta serie.

Ya les comenté que esta serie fue realmente buena, tenía mucho ritmo, acción, adrenalina, siendo que nadie corría, aunque si saltaban las balas, hubo mucho muerto, en las formas más creativas y diversas, pero casi todo el tiempo los personajes estaban muy comódamente sentados en sus despachos o en la oficina del Intendente Valmora, dedicados a resolver una cagada tras otras que alguno de sus mejores amigos causaba. Y así y todo, sumado a los excelentes diálogos, llenos de ironía y metáforas, que a veces cansaba tanta metáfora pero, al menos yo que me echaba al hilo los cuatro capítulos de la semana, quedaba realmente agitada, energizada, siempre intrigada y pensando qué pasará la próxima semana.
Creo que eso sólo sucede cuando una historia es buena.
Que el espectador quedé atrapado, con la cabeza funcionándole a mil por hora, pensando en será o no, que sí o que no.


Los peros comenzaban, lamentablemente, al igual que años atrás con la otra también famosísima teleserie argentina, "Resistiré", cuando aparecían ante la pantalla, los protagonistas de la trama. Por un lado la encantadora, preciosa, simpática, Natalia Oreiro, que es todo eso y más, pero que no la deben poner en situaciones conflictivas como actuar de seria, de drama, de demostrar matices emocionales, porque no sabe trasmitirlos. Ella es para la comedia, para las entrevistas, porque es una chica rápida, linda, instruida y sabe qué responder y cómo hacerlo, pero ni canta lindo ni actúa bien. 
Creo que llega un momento en la vida que uno debe conocerse a sí mismo, por muy argentino o uruguayo que seas y te creas la muerte y saber para que sí sirves y para qué no. Pero como a mi me gusta y me cae muy bien Natalia Oreiro, quiero creer que la metieron en esta historia, porque como es un cuasi buen producto de la señal internacional Fox, donde logro hacer grito, fama y fortuna con "Lynch", deben haber exigido como financistas, que ella estuviera en los roles protagónicos.

El otro gran pero que tenía esta serie, era el protagonista masculino, de ENTRE CANIBALES, el actor chileno Benjamín Vicuña, el cual hace años está avencindado en Argentina, pero eso no implica que se haya juntado con la gente correcta, que le dijeran con toda sinceridad, en su carita, que para hacer buenas producciones no basta con ser un cari lindo (que ya no es tanto, sobre todo desde que perdió las cejas), que no basta porque si te ponen un personaje que es un eje fundamental de la historia, que debe atraer de una forma y al mismo tiempo hacerte desconfiar. Seducirte y hacerte dudar, no puedes poner, con todo respeto, a un saco de pelotas que cuando debe personificar su lado tormentoso y malvado, utiliza el recurso movimiento de cuello, cual "El exorcista" y rallar en el tema de la maldad, casi hasta dar risa del parecido, sudaca, con "Cabo de miedo". Y querer justificar tus motivos mentales defectuosos, complicados, al son de la cocaína, que para el caso no sabe ni jalar, ni de cantidades y qué pasa realmente si consumes de la manera y continuidad que él lo hacía, es decir, uno como espectador, menos experto en temas de drogas y sin saber actuación, esperaba ríos de desangramiento nasa por las cantidades que se metía. O sea un pésimo actor. 


Pero lo bueno de lo malo, es que en toda tira, teleserie, unitario, película, obra de teatro, cuando te exigen por razones financieras poner a dos protagonistas, pésimos actores. Si realmente amas tu trabajo, para salvar la historia, además de contar con una trama atrapante, debes echar mano de los "actores secundarios". Los cuales con seguridad, levantaran la historia, le darán trama, emoción, drama, adrenalina y seguramente cuando lleguen los Martín Fierro, ganarán todos las estatuillas (lo que ocurrió con la teleserie "Resistiré").

Como serán de malos los protagonistas de esta serie, que hasta un Joaquin Furriel (Valmora), que para mi gusto es pésimo actor, se levanta de las brasas y puede jugar gallito con Oreiro y Vicuña y osar ganarles.
Del electo secundario hay que aplaudir de pie a: Eduardo Blanco, Mario Alarcón, Natalia Lobo, Gabriel Gallichio, Liliana Cuomo, Julian Rubino, Gisele Motta, Candela Rodan, Salo Pasik, Fabian Gianola.
Todos en distintas situaciones, realmente demostraron que ser un buen actor, consiste justamente en que el espectador, no se de cuenta que están actuando. Tu sabes que están actuando, pero son tan naturales, tan como tú, tanto te identificas con sus sentimientos, acciones, pensamientos, que les crees, los comprendes, justificas, quieres. 


En especial tengo que destacar a: Eduardo Blanco, quien hace del "Armenio", un personaje crucial en la serie, ya que es el asesor juridico de la Intendencia. Fue brazo derecho de Valmora padre y ahora del hijo y es el primero que se retira del mundo de la politica cuando su hija Lucía (Giselle Motta) le echa en cara su posible corruptela. 
Otro grande es Mario Alarcón (Francisco), el socio de Ariana. Un actor que es curioso porque su apariencia tan delgada, siempre congelado en una edad adulta, tiene una fuerza, una simpatía, una liviandad para actuar, que en todas sus apariciones en la TV o el cine, le he creído y querido.
Del electo secundario femenino está, Liliana Cuomo, alías "Pelusa" que es la secretaria y casi madre de Valmora hijo y la guardadora de secretos de Valmora padre. Es realmente una actrizasa, tiene un rol pequeño al principio y supongo que por una cosa de simpatía con el público fue tomando protagonismo, es realmente un mujerón. Tiene una fuerza interior, una personalidad, que se impone, pese a no contar con los cánones de belleza exigidas en la Argentina (flaca, anorexica y tonta), es de principio a fin una mujer guapa, interesante, simpática y un personaje que sabe más de lo que uno imagina.

Otro acierto increíble de esta serie, fue el elenco juvenil. Cuatro jóvenes o dos parejas, en donde cada uno por individual provocó sintonía del espectador (yo) hacia el personaje, calidad actoral todo el tiempo. Ellos son: Gabriel Gallichio (Diego), quien interpreta al periodista que lucha por la justicia a favor de los desposeídos. Es el hijo adoptivo del Padre Martín Pirandello y el hijo, producto de la violación de su madre Ariana o Ángeles. Es realmente un chico especial, no lo conocía, no lo había visto en ninguna otra parte y es muy bueno de verdad. Tiene ese pequeño detalle que debe tener un actor, naturalidad, relajo, para que el espectador crea en el personaje. Realmente bueno, mucha fuerza, coraje, yo al menos le creí todo, todo, todo el tiempo. 
Julián Rubino (Ramiro), el mejor amigo de Diego. Entre los dos sacan un diario, donde le dan bombo a todos los corruptos. Este chico también es muy bueno, desconocido para mí y realmente lindo, muy lindo.
Giselle Motta (Lucía), que además de ser una chica muy, muy guapa, cumple el rol de la novia de Diego. Ella es de la clase alta de Ingeniero Márquez y las circunstancias de la vida hace que se conozca con Diego, ella se enamora al instante, él lo hará después. Y ella también tiene una fuerza, una energía, una naturalidad en su actuación, que uno le cree y la quiere.
Y Candela Redin (Sabrina), que es la novia de Ramiro y es la personificación de la verdadera revolución, es la justa, la coherente, la que va al choque pero no de forma alocada, sino con justicia pero sin quebrantar por nada sus principios. Es la más hippie de los tres y es adorable.  
Realmente este equipo juvenil, le puso mucha energía y electricidad a la historia. Sin contar que si Diego no le hubiera puesto ñeque cuando se enteró que Ariana era su mamá, realmente esto habría sido una miasma.



Pero como les conté, ocurrió que en Argentina, la sintonía los abandonó, así como el ratting y mientras yo gozaba todos los fines de semana, aventándome mi non stop de ENTRE CANIBALES, de la noche a la mañana empezaron a acortar los días de trasmisión y a adelantar el fin de la tira. Lo que provocó que mucho de la emoción, adrenalina, que los actores secundarios junto a la trama, historia, provocaron y lograron, se fuera a la mierda. 

Digo esto fundamentalmente como los protagonistas eran malos actores, llegó un momento en el que ya no hubo tiempo de hacer desarrollo de personajes, el tiempo apremiaba y para acortar el material existente, tuvieron que meter mucha tijera, bien hecha la tijera, pero para un mal actor no poder justificar de cliché en cliché sus razones, hizo que nos encontráramos con un cambio radical de bueno (ahuevonado) de Larralde, a uno malo, malvado, más malo que Robert de Niro, en "Cabo de miedo", sin aviso previo. Reconozco que me di cuenta prontito que Vicuña iba para chivo expiatorio y que era el elegido para ser el malo, malísimo de la historia. El problema es que la justificación, razones, motivos, por los cuales llegó a ser todo lo que le veríamos hacer, como faltaban clases de actuación, no tenían cama que lo sostuviera. Entonces pasó que cada que salían en pantalla la pareja protagónica, que además se amaban, o sea salían juntos demasiadas veces, pasamos de una serie con adrenalina y emoción a una campiña de verde pasto, donde pastaban dos pelotudos y nada más.
Y sobre el final, pues lo que ya creo que suena a obvio ¿no? Agustín Larralde es el cuarto personaje que sí participó en la violación, el que sobra es Rafael Valmora que estaba en Estados Unidos estudiando un postgrado en Economía. Y por descarte, después de deshacerse de cada uno de los otros tres, previo examen de ADN, el elegido para papá de Diego Pirandello es..... Larralde, el loquito mal actor.

La adrenalina fue disminuyendo, los capítulos de la misma duración se hicieron eternos de aburridos. Ariana por su lado, tuvo que ponerse a llorar y contarle a quien quisiera escucharle, la historia de lo ocurrido hace 20 años y la palidez de su rostro, sumado a la blancura de sus ojos y la inexpresividad de su cara, fueron convenciendo cada vez menos.
Por suerte, de tanto en tanto, los directores mientras editaban, ponían en escena a Eduardo Blanco, Fabian Gianola, Mario Alarcón, hasta el mismo Salo Pasik, que no es ningún gran actor, brillaba como el mejor.
De los homenajes indirectos y no por ello menos hermosos, está el hecho que la banda sonora, nombre de la teleserie, estuviera cantado por nuestro querido Gustavo Cerati. Y que las dos canciones últimas de la serie, también fueran de su autoría. A mi me encantan los homenajes y éste lo fue absolutamente.

Sobre la serie, una pena el fin abrupto porque realmente pese a los protagonistas, la historia era muy  buena y entretenida. Cada capítulo, te dejaba exangüe, con ganas de saber más, de conocer más entretelones. 
Otro pero, aunque eso ya es cuestión de posiciones políticas, es el odio parido que Juan José Campanella, siente por el Kichnerismo, porque realmente esta serie era una oda a la crítica sobre la política actual, en contra abierta a Cristina K. Pero bueno, eso es un tema de Campanella, que pese a que no comparto, tampoco me meto mucho porque el que entienda la política argentina o es oriundo o que me de una clase, porque es very, very, complicada.
Pero en lo que respecta a ENTRE CANIBALES, tengo que decir:
Absolutamente recomendada!!!

SINOPSIS:
La historia se centra en el personaje de Ariana, una mujer oriunda de la provincia de Neuquén, que a los 17 años fue violada brutalmente por cuatro jóvenes, hijos del poder, y que veinte años después vuelve en busca de venganza. Una de las personas que probablemente participó en la violación, es Rafael Valmora, ahora es el Intendente de Ingeniero Marquez, lugar donde ocurrió el hecho y que aspira al cargo de Presidente de la Nación. También está, Agustín Larralde, quien posee un cargo de poca importancia en la intendencia, decididamente corrupta, pero el personaje se destaca por su honradez, y comenzará a tener una historia de amor con Ariana. En la terrible situación luego de la violación, Ariana tuvo un hijo, Diego, que quedó a cargo del cura Martín Pirandello, y que no tiene relación con ella.
CALIFICACION:
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FICHA TECNICA:
Título original: Entre canibales, serie argentina, 2015
Creador: Juan José Campanella
Dirección: Miguel Colom, Pablo Vasquez y Diego Sánchez.
Guión: Juan José Campanella, Gustavo Belatti y Emanuel Diez
Reparto: Natalia Oreiro, Joaquin Furriel, Benjamin Vicuña, Eduardo Blanco, Gerardo Chendo, Mario Alarcón, Natalia Lobo, Veronica Pelaccini, Marcelo Melingo, Gabriel Gallichio, Liliana Cuomo,  Julian Rubino, Gisele Motta, Candela Rodan, Danny Pardo.

15 de septiembre de 2015

Ánimas Buenos Aires.


Sin conocer nada absolutamente en materia de animación, me encontré con este documental, será que después de Fontanarrosa, quedé flasheada y es un género al que le meto las narices con interés y agrado. En esta ocasión se trata de ÁNIMA BUENOS AIRES. Titulo que se puede prestar para varias interpretaciones: una, para que te animes y veas Buenos Aires a través de los mal llamados "dibujitos", otra, en la que son ánimas, es decir, muertos que andan con su alma en pena, en vilo, que no han podido morirse completamente y que pululan alrededor tuyo y por último también sino animas que vendrá de animación = dibujos = seres ficticios dibujados al color, al lápiz y que bajo los efectos cinematográficos cobran vida, levantan el animo (animar) conducen a los muertos a su último cauce (ánimas). Creo que a estas alturas del partido, todas las posibilidades son válidas.

De la ignorancia, que repito tengo sobre este tema, hablaré de conceptos obvios como "me gusta" o "no me gusta". Me gustaron mucho las historias: "Meado por los perros" y "Claustropolis". En las dos los dibujos de personas son muy tiernos. En ambos la recreación de Buenos Aires, de sus edificios hermosos, de sus barrios, de los negocios de barrio, está logrado al cien por ciento. Una que ha visto fotos, que ha viajado al otro lado de la cordillera y en vez de entrar a los Mall, más bien camina por las calles, mirando edificios, casas, calles, árboles, digamos que todas quedan en la retina y después te hacen reconocerlos en estos bellos dibujos. La otra que se suma a mis "me gusta" es "Stencil tango", donde se muestra a una pareja (hombre mujer) bailando tango, ellos en versión stencil se mueven graciosamente por todas partes de la ciudad, de muro en muro van encontrándose con personajes, calles, casas, edificios, personajes. Precioso.

Los otros, también son buenos, aunque un poco más aburridas las historias, porque recordemos que además de ser dibujos a lápiz, acuarela, colores varios, son animadas, es decir, nos relatan cada una con su título previo, una pequeña historia, otras más largas y quizás eso es lo que las hace un poco más difíciles de digerir.
Me gusta, realmente me gusta este género, será de mis viejos años de Mafalda, ahora de Fontanarrosa, no lo sé, pero me gusta.
Totalmente recomendado!!


SINOPSIS:
Una película que revela el alma de Buenos Aires, a través del humor y la sutil mirada de los mas destacados artistas de la animación y la gráfica argentina.

CALIFICACION:
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FICHA TECNICA:
Título original: Anima Buenos Aires, Argentina, 2011
Dirección: María Verónica Ramírez
Guión: Caloi y María Verónica Ramírez, Carlos Nine, Lucas Nine, Pablo Rodríguez Jáuregui, Florencia Falvre, Pablo Falvre, Mario Rulloni, Juan Pablo Zaramella.

8 de septiembre de 2015

Vino para robar.

Creo que lo que más me gusta de la vida, es cuando se da por hecho que algo que esperaste con ansías, finalmente y a veces, de la manera más casual, llega a tus manos. Desde que se terminó Graduados, teleserie argentina que veíamos con mi sisterna Manucita, quedé absoluta y totalmente pegada con Daniel Hendler, pero podía rascarme la panza con mi pegadez porque no había nada en cartelera ni cerca ni lejos, para ver de él. 

Hasta que el año pasado, nos enteramos que había hecho VINO PARA ROBAR, con nuestra amada, mi amada, Valeria Bertuccelli. Y por supuesto que lo único que quería era verla. A cada persona que viajó a Baires, le encargué que si encontraba esta cinta me la trajera, la busqué y busqué pero nadie me supo dar señales sobre ella.

Revisaba su ficha cinematográfica y la amaba a la distancia, encontraba que era lo más y que lo único que esperaba era verla alguna vez. Hasta que esa vez llegó espontánea y tiernamente días atrás. De la manera más casual, yo viajaba de canal en canal haciendo zapping y de pronto, caigo en Cine Max Premium y mirando detenidamente cada película que iban a dar, descubro el título VINO PARA ROBAR. Al principio no sabía si era la misma o tenía nomás el título parecido, pero cuando revisé su ficha cinematográficacasi me dio un infarto "era".

Pero bueno, dejemos la introducción atrás y pasemos al tema que nos convoca. VINO PARA ROBAR, es una historia de comedia, drama, amor, traición y thriller. Una suerte de James Bond, Agente 86 a la latinoamericana, donde todo lo que se les pueda ocurrir en materia de locuras y aventuras, será escaso.
Álvaro o Sebastián (Hendler) es un sofisticado ladrón de piezas realmente valiosas, es atractivo, rápido, ágil, inteligente, sagaz, sediento de poner a prueba su inteligencia y adrenalina, para ir por cosas realmente valiosas. Ahora está en acción para robar la mascara de oro de Colombia, que está en exhibición en un gran museo de Baires. Ha estudiado la situación y deberá seducir a la guía de turismo y encargada del área, para poder dar con su llave de acceso y lograr el objetivo. 
La guía Natalia o Mariana (Bertuccelli), cae redonda, ¿quién no pues? y se van a cenar, ella toma de más, porque con más alcohol del debido, habla hasta por los codos, pero eso es tan solo un detalle para a Alvaro o Sebastián.
Después de dejarla en casa, parte raudo en busca de su objetivo: apoderarse de la pieza. Es entonces cuando a casa, recibe una llamada de una Natalia o Mariana aterrada, consulta a quien tenga su celular, si además no habrá encontrado un llavero, a lo que Álvaro o Sebastian, se identifica, Natalia o Mariana, se tranquiliza y le cuenta que ella entró al museo y robó la pieza de oro de Colombia, a lo que Álvaro o Sebastian, queda perplejo y deciden reunirse en el terminal. Él con la rapidez que lo caracteriza cambia las piezas, se despiden y cuando ella va en camino, lo llama para agradecer que le devolviera la pieza original. O sea en esta ocasión, Natalia o Mariana, fue más inteligente, dejó que él hiciera todo el trabajo, para finalmente ella, quedarse con la pieza original y desaparecer. Entonces alguien queda un tanto picado.

Pero un robo lleva a otro y nuevamente se encontrarán. Él quiere de vuelta su pieza y ella, lo va metiendo en otro objetivo: conseguir el Malbec que no se tomó Napoleón allá por sus años mozos. En el camino tendrán muchas aventuras, desventuras, él ya está completamente enamorado de ella, cosa entendible también, porque Natalia o Mariana (Bertucelli), es divina, pero un poco de traición removerá lo que podría ser color de rosa, correrá un poco de acción, tubos de aire acondicionado, vinos para confundir, dar y regalar, balas algo locas por aquí y por allá, muertes, sangre, presos, gente que viaja con 500 mil dolares y nuevos objetivos para robar en un futuro no tan lejano.

Verdaderamente VINO PARA ROBAR, es una cinta que lo mantendrá a carcajadas, a punto de caer de la silla. Las actuaciones de estos ladrones internacionales, son magníficas, además de hermosa ella, guapo él, aquí nadie queda descontento. También están Martín Piroyansky que es casi indispensables en las cintas con Hendler, qué decir de nuestro querido Alan Sabbagh y el siempre guapo, buen actor y encantador Juan Leyrado. Es decir, esta historia posee un elenco de aquellos y la seguridad de que lo pasarán del uno, va de antemano.
Totalmente recomendada!!


SINOPSIS:
Sebastián conoce a Natalia cuando está intentando robar una importante pieza de arte de un museo, y ella le gana de mano.

CALIFICACION:

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FICHA TECNICA:

Título original: Vino para robar, Argentina, 2013
Dirección: Ariel Winograd.
Guión: Adrián Garelik.
Género: Comedia - suspenso
Duración: 103 minutos
Reparto: Daniel Hendler, Valeria Bertuccelli, Martín Piroyansky, Pablo Rago, Mario Alarcón, Alan Sabbagh, Luis Sagasti, Juan Leyrado.

1 de septiembre de 2015

119 Esperanzas.

Desde que una querida amiga, Claudia Lagos, me contará sobre la existencia de 119 Esperanzas, quería verlo. Y con mi sisterna Manucita, logramos verla justo para el día del aniversario (2015) del detenido desaparecido. De alguna manera estar en sintonía ¿que no?

Es un documental muy sencillo, me impresiona justamente por eso, que se haya demorado tanto en ver la luz, ya que tiene una data del 2013 y recién está inaugurándose dos años después. Que recién los nosotros, espectadores, pudiéramos verlo.

El título, lo encuentro de una poesía única, 119 ESPERANZAS, trata sobre los 119, la historia de 119 detenidos desaparecidos en Chile. Que como bien dice el abogado de derechos humanos Roberto Garretón, son los primeros casos que van entregándole título a esta nueva y terrible categoria de "desaparecidos", ya que en un primer momento eran sólo detenidos. Sacados de sus casas, atrapados en la vía publica y llevados a rumbos desconocidos, donde además de detenidos (ilegalmente) eran trasladados a lugares (desconocidos), ya que los familiares iban a las comisarías y ahí les decían que no estaba nadie con esos nombres y después, con el tiempo sabríamos que eran los centros de detención y tortura como Londres 38, Villa Grimaldi, Tres y Cuatro Alamos, entre otros.

Los 119, eran en su mayoría jóvenes, muchos con militancia, muchos pertenecientes al MIR. Los 119 además de vivir el horror de ser detenidos, torturados, desaparecidos, fueron las víctimas de esta manipulación de imagen, de demostración del poder que tenían los militares, la junta militar, la dictadura, sobre la prensa y que fraguaron lo que se conoció como "Operación Colombo". 
Operación Colombo fue la campaña de desprestigio de los 119, inventando que no estaban detenidos, menos desaparecidos porque en realidad habían escapado a Argentina o Brasil por razones nada políticas y que en el camino, habían muerto en enfrentamientos entre ellos mismos. 
Esta información hechiza fue montada primeramente en Brasil, con la creación instantánea de dos revistas que hablaban sobre estos supuestos enfrentamientos entre jóvenes extremistas de Argentina, Brasil y Chile, informaciones que posteriormente serían recogidas por los dictadores de esos tres países y se encargarían de esparcirlas a través de los medios de prensa local. En el caso de Chile, este show fue orquestado gracias al apoyo de los diarios El Mercurio, La Segunda y La Tercera, que apoyaban abiertamente la dictadura. 

Aunque los medios dijeran misa, los familiares, empezaron a darse cuenta que todo era un espantoso montaje. Pero no por ello, el show trajo consigo a ninguno de los cuerpos de las 119 personas, supuestamente enfrentadas, porque en los diarios aparecían fotos, carnés, identidades digamos pues y entonces por qué no entregaron los cuerpos.
Y claro, este tipo de montajes provocó la macabra y terrible situación que muchos de los detenidos desaparecidos, que supuestamente habían muerto en equis circunstancias, olvidaran esa mentira y los hicieran aparecer después, años después en otras situaciones y así como tristemente contara uno de los familiares de los 119, a su hermano lo mataron en diversos períodos, cuatro veces.  

Debo decir que a mi estos trabajos audiovisuales de derechos humanos, me producen además del respeto y admiración por las víctimas, sus familiares, una pena tan grande al constatar como en Chile, el tiempo pasa y ninguno de los desaparecidos es encontrado, tampoco un pedir perdón nacional, militar, estatal, menos hacer justicia en estos casos y saber que los familiares que buscan, madres, hermanos, tíos, primos, envejecen y algunos mueren sin saber dónde están. Porque creo que este documental de haber tenido vivos a los familiares de sus 119 desaparecidos, tras conversar con cada uno de ellos y conocer quienes eran sus desaparecidos y tal, tendría que haber tenido una duración de dos horas al menos, ya que por mucha edición que se hiciera, eran 119 desaparecidos y sus respectivas familias. Pero lamentablemente uno se da cuenta que cada vez son menos los familiares que pueden abrazar la gigantografia de su familiar desaparecido. Y esa sensación de injusticia por parte del Estado, de los militares al abrir los pactos de silencio, que podría evitarse, me eriza la piel por completo.

Pensar que muchos de los familiares, sobre todo los de más edad, se quedan tan sólo (que no es menor) con el derecho a la memoria, como cuenta una de las madres de los 119 que dice: "que como no tuvo la suerte de encontrarlo, ni que se hiciera justicia, al menos, le queda el derecho a la memoria, que esa nadie se la arrebatará". Que mierda de historia la nuestra, que mierda de Estado, de uniformados, quienes no hacen nada, no mueven mucho sus dedos para que se haga justicia, para saber dónde están. 
Nuestra labor entonces, la tuya, la mía, la de todos, tiene que seguir en pie, por ellos, por los que no están, por los familiares, por aquellas mamás, hermanos, tíos, que van envejeciendo y necesitan que trabajemos junto a ellos en no permitir que nunca jamás la memoria sea pisoteada.
Recordar, no dejar nunca de gritar, exigir, mostrar, palabras, fotos, imágenes, de todas estas personas que soñaron con un proyecto de país, de vida, más justa y que por eso los detuvieron y desaparecieron. Gritar, aclamar, mostrar, exhibir ante todos los ojos que estén abiertos, las imágenes de la memoria, del recuerdo imborrable, de todo lo que pasó en Chile.

Y 119 Esperanzas, es en ese sentido un trabajo al cual hay que sacarse el sombrero y agradecerlo. Dejar una y mil constancias, de la historia de estas 119 personas, hombres, mujeres, sus rostros, sus historias, quienes eran y además sumarse a la lucha de sus famiias por exigir justicia, saber la verdad y no permitir que pisoteen la memoria.
Totalmente recomendado!!


SINOPSIS:
Documental sobre el caso de “Los 119”; Chilenos víctimas de la operación Colombo, el primer montaje comunicacional de la dictadura de Pinochet. Unimos los retazos de la memoria no oficial para reconstruir la verdad; son los testimonios de familiares los principales protagonistas. Sus recuerdos, miedos, sueños y esperanzas nos dan cuenta de su lucha, 38 años esperando justicia.

CALIFICACION:
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FICHA TECNICA:
Título original: 119 esperanzas, 2013, Chile.
Dirección: Luis Parra Fuentes.
Fotografía: Pedro Micelli.
Género: documental.
Duración: 60 minutos.