Grabé SOLO UN PADRE (Europa europa, Vtr 401), fundamentalmente porque era italiana y vaya que me gusta el cine de ese país. Anteriormente me tocó ver lgunas escenas y sumo motivos para verla en otro momento. Después le comenté a mi sisterna Manucita, que la tenía grabada y le dije estar segura que era una cinta lacrimógena, para personas que hemos perdido algún pariente, sólo que esta vez la historia es de un padre que se queda solo a criar a su hija de meses. Pero ayer cuando la ví, cambió mucho mi apreciación a por ella.
El supuesto que la trama versa sobre un padre que con esposa ausente, le toca criar a su hija de a penas meses, es tal cual. El plus o lo que marca la diferencia, es la manera en que su director Luca Lucini, enfrenta esta problemática, justamente para no hacer de SOLO UN PADRE, un paquete de klínex, mocos obvios, lágrimas frente y dentro de la pantalla.
Lo primero, es no lanzar toda la información al espectador, es decir, todos percibimos que no hay una madre, que el padre, Carlo, está muy apesadumbrado por esta ausencia, lo que nos hace suponer que es porque la mujer ha muerto. Pero nadie lo dice abiertamente. Hasta que una noche en que Carlo y sus amigos, colegas cirujanos, compañeros de trabajo, están en casa del primero preparando la cena como todas las semanas. En un momento, Sofia o Frijolito, la bebé, güagüa, beba, se pone a llorar y el papá debe acudir al rescate y mientras la duerme, dice "verdad Sofía, que es mucho más fácil decir mamá que papá". Obvio que a los amigos se les caen los calzones, al espectador las lágrimas y quedamos claros que la procreadora no está entre nosotros.
Después de eso, al espectador se le va el aliento, tratando de indagar cómo reverendos cochayuyos (algas del mar) fue que Carlo se quedó sin su mujer, cómo murió, cuando. También vamos conociendo más de las rutinas del papá, de lo preocupado por no decir hipocondríaco que es con respecto a la salud de Sofía y como la ayuda de todos los que lo rodean, a veces lo asfixia.
Un pequeño cliché de la historia, pero con el cual sentimos un gran alivio, es cuando a los minutos de comenzada la historia, Carlo conoce a Camille, que es la vecina del caserón ruinoso a cuadras de su casa. Porque es obvio que más temprano que tarde, ellos quedaran juntos y como de alguna manera somos machistas (las mujeres) partimos de la base, que el papá es muy amoroso, preocupado, rallando en la histeria, pero finalmente es hombre = inepto y las tareas de crianza y sobrevivencia de la beba, corren serios peligros.
Y ahí es donde quizás uno quisiera que la cinta fuera del tipo lacrimógena, para limpiar los ojos, para despejar las narices echando mocos afuera, pero no ocurre tanto así, ya que la vuelta de tornillo que le da el director a SOLO UN PADRE, es justamente enfrentar a un hombre joven, de 30 años, guapo, excesivamente preocupado de su fisico, cirujano exitoso, dueño mayoritario de la clínica en la que trabaja, que ha quedado viudo y su hija sin madre, desde el día del parto y cómo se las verá para paliar esta situación.
Y digamos que lo hace bastante bien.
Primero que nada, en la más psicológica, se enfrenta a sus miedos, a las miles de veces que su esposa le dijo que era un cobarde y que quizás lo sea, pero que quiere dar la pelea y dejar de serlo. Que fue él el que insistió en tener un bebé y que ahora que está aí frente a él y que obviamente sólo tiene a su padre para que vele por ella, él será quien la proteja, la cuide y le hable, le hable y le hable, tanto como lo hacía cuando todavía estaba en el vientre de su madre.
Es una tierna cinta sobre la relación de un padre con su beba, que hay que destacar que es la bebé más encantadora, buena, tierna, dócil, que he visto en mi vida cinematográfica. Con bebés así dan ganas hasta de ser mamá. Y Carlo junto a su niña es el mejor padre, que apoyado por toda la familia y los amigos y también de Camille, saldrá adelante muy bien parado. Y eso que no les he contado ni la mitad de la historia, menos el final, con el que se quedaran perplejos.
Totalmente recomendada!!
SINOPSIS:
Carlo, tiene treinta años, un buen coche, un trabajo que le gusta y una hija de diez meses, Sofia, a la que adora. El vacío dejado por la pérdida de su mujer en el parto de Sofia, es llenado por el cariño y la atención de sus amigos y sus padres, que le echan una mano con la niña y están siempre con él... tal vez demasiado. Pero la llegada de Camille, a su organizada y rutinaria vida lo cambiará todo.
CALIFICACION:
**********************
FICHA TECNICA:
Título original: Solo un padre, Italia, 2008
Dirección: Luca Lucini
Guión: Giulia Calenda, Maddalena Ravagli, basada en la novela de Nick Earls
Música: Fabrizio Campanelli
Fotografía: Manfredo Archinto
Género: Drama
Reparto: Luca Argentero, Diane Fleri, Claudia Pandolfi, Anna Foglietta, Fabio Troiano, Sara D´Amario, Alessandro Sampaoli, Elisabetta De Palo, Fabiana Gatto, Michela Gatto.
El supuesto que la trama versa sobre un padre que con esposa ausente, le toca criar a su hija de a penas meses, es tal cual. El plus o lo que marca la diferencia, es la manera en que su director Luca Lucini, enfrenta esta problemática, justamente para no hacer de SOLO UN PADRE, un paquete de klínex, mocos obvios, lágrimas frente y dentro de la pantalla.
Lo primero, es no lanzar toda la información al espectador, es decir, todos percibimos que no hay una madre, que el padre, Carlo, está muy apesadumbrado por esta ausencia, lo que nos hace suponer que es porque la mujer ha muerto. Pero nadie lo dice abiertamente. Hasta que una noche en que Carlo y sus amigos, colegas cirujanos, compañeros de trabajo, están en casa del primero preparando la cena como todas las semanas. En un momento, Sofia o Frijolito, la bebé, güagüa, beba, se pone a llorar y el papá debe acudir al rescate y mientras la duerme, dice "verdad Sofía, que es mucho más fácil decir mamá que papá". Obvio que a los amigos se les caen los calzones, al espectador las lágrimas y quedamos claros que la procreadora no está entre nosotros.
Después de eso, al espectador se le va el aliento, tratando de indagar cómo reverendos cochayuyos (algas del mar) fue que Carlo se quedó sin su mujer, cómo murió, cuando. También vamos conociendo más de las rutinas del papá, de lo preocupado por no decir hipocondríaco que es con respecto a la salud de Sofía y como la ayuda de todos los que lo rodean, a veces lo asfixia.
Un pequeño cliché de la historia, pero con el cual sentimos un gran alivio, es cuando a los minutos de comenzada la historia, Carlo conoce a Camille, que es la vecina del caserón ruinoso a cuadras de su casa. Porque es obvio que más temprano que tarde, ellos quedaran juntos y como de alguna manera somos machistas (las mujeres) partimos de la base, que el papá es muy amoroso, preocupado, rallando en la histeria, pero finalmente es hombre = inepto y las tareas de crianza y sobrevivencia de la beba, corren serios peligros.
Y ahí es donde quizás uno quisiera que la cinta fuera del tipo lacrimógena, para limpiar los ojos, para despejar las narices echando mocos afuera, pero no ocurre tanto así, ya que la vuelta de tornillo que le da el director a SOLO UN PADRE, es justamente enfrentar a un hombre joven, de 30 años, guapo, excesivamente preocupado de su fisico, cirujano exitoso, dueño mayoritario de la clínica en la que trabaja, que ha quedado viudo y su hija sin madre, desde el día del parto y cómo se las verá para paliar esta situación.
Y digamos que lo hace bastante bien.
Primero que nada, en la más psicológica, se enfrenta a sus miedos, a las miles de veces que su esposa le dijo que era un cobarde y que quizás lo sea, pero que quiere dar la pelea y dejar de serlo. Que fue él el que insistió en tener un bebé y que ahora que está aí frente a él y que obviamente sólo tiene a su padre para que vele por ella, él será quien la proteja, la cuide y le hable, le hable y le hable, tanto como lo hacía cuando todavía estaba en el vientre de su madre.
Es una tierna cinta sobre la relación de un padre con su beba, que hay que destacar que es la bebé más encantadora, buena, tierna, dócil, que he visto en mi vida cinematográfica. Con bebés así dan ganas hasta de ser mamá. Y Carlo junto a su niña es el mejor padre, que apoyado por toda la familia y los amigos y también de Camille, saldrá adelante muy bien parado. Y eso que no les he contado ni la mitad de la historia, menos el final, con el que se quedaran perplejos.
Totalmente recomendada!!
SINOPSIS:
Carlo, tiene treinta años, un buen coche, un trabajo que le gusta y una hija de diez meses, Sofia, a la que adora. El vacío dejado por la pérdida de su mujer en el parto de Sofia, es llenado por el cariño y la atención de sus amigos y sus padres, que le echan una mano con la niña y están siempre con él... tal vez demasiado. Pero la llegada de Camille, a su organizada y rutinaria vida lo cambiará todo.
CALIFICACION:
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FICHA TECNICA:
Título original: Solo un padre, Italia, 2008
Dirección: Luca Lucini
Guión: Giulia Calenda, Maddalena Ravagli, basada en la novela de Nick Earls
Música: Fabrizio Campanelli
Fotografía: Manfredo Archinto
Género: Drama
Reparto: Luca Argentero, Diane Fleri, Claudia Pandolfi, Anna Foglietta, Fabio Troiano, Sara D´Amario, Alessandro Sampaoli, Elisabetta De Palo, Fabiana Gatto, Michela Gatto.
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