Un homme et une femme.

No deja de tener su toque especial, poder escribir esta nota de cine, con el soundtrack de la película como música de fondo. Y será porque UN HOMME ET UNE FEMME, la ví hace muchos años atrás y si bien me impactó, me encantó y quedé hasta el día de hoy sugestionada, atrapada, obsesionada con ella, ahora que la he vuelto a ver, me doy cuenta que entendí casi nada, pero la banda sonora fue la que me atrapó por siempre jamás e hizo que ahora que están dando un especial de Claude Lelouch, en Europa europa (Vtr 401) quisiera verla de nuevo. Y volví a verla de nuevo, algo que no suelo hacer y fue a diferencia de otras experiencias, un momento mágico. El placer de volver en el tiempo, volver a un atrás que ya no está y que sin embargo sigue latiendo tan fuerte como la primera vez.

Es fuerte, al menos para mí, volver a ver una cinta que me gustó mucho y que quizás al reencontrarse nuevamente con ella, unos ojos más críticos quieran descuerarla, destrozarla sin siquiera poder evitarlo. Así me ha pasado en otras ocasiones, pero esta vez no ocurrió. Al contrario, fue realmente como verla de nuevo, había tanto de fantasías en la imagen, los recuerdos que tenía sobre ella, mezcla de la banda sonora que me ha acompañado hasta el día de hoy y que con cada tema trataba de memorizar el instante en el que ocurría con las imágenes de la historia y por supuesto todos mis temas consentidos tenían que ser cuando estaba la pareja juntos. Y ahora que la ví de nuevo, descubrí que no era tan así la cosa, pero eso no era causa suficiente para destruir la inocencia de los viejos tiempos, sino más bien hacerla crecer y además dotarla de memoria, de realidad, de nuevas sensaciones.

UN HOMME ET UNE FEMME, es una película muy especial, porque tiene la cualidad de contar una historia muy simple y a través de las imágenes, la fotografía y la música, convertirla en algo mucho más grande de lo que es. En esta ocasión me pasó que encontré que la banda sonora y las imágenes eran realmente los hilos centrales de la historia y que el recurso de más imágenes contando más historias, que usó Lelouch, en vez de dotar a la película de diálogos simples, innecesarios que habrían terminado la historia en dos minutos, nos íbamos adentrando en otros mundos, sensaciones, emociones, que cada quien al ir mirándolos iba percibiendo de distinta manera, desde las emociones que ese día tenía a flor de piel, de las similitudes, parecidos.
Guardando las distancias, es como con las películas mudas que basaban la trama en las imágenes y en la música (casi siempre un piano) que iba armonizando o entristeciendo los momentos.
Además que los actores tan expresivos a sus maneras, ella un tanto pánfila para mi gusto, hermosa, con esos ojos, su abrigo, ocultar los ojos tras el abrigo, muchos silencios, ella caminando por las calles de París, pensando en él, fumando, sentada, pensando en él. Mientras él en su auto de carreras, avanzando en las carreteras, con lluvia, con frío, fumando, fumando y pensando en ella, en el viaje en auto juntos.
Creo que si la historia no tuviera ningún diálogo, tan solo la banda sonora y las hermosas fotografías del mar, de ellos en el auto, de la lluvia cayendo por el vidrio del auto, ellos en el café, fumando, junto a los niños en la playa, uno podría entender absolutamente toda la simple historia, que es  nada menos que una historia de amor, de dos personas adultas solitarias, viudos, que se encuentran casualmente y que van enamorándose.

La relación de él (Jean Louis Trintignat) con su hijo Antoine y con la hija de ella, es muy bonita, hay una dulzura que él no siendo de mi entero gusto masculino, tiene una picardía, una espontaneidad, una belleza interior que aflora y resulta simpático. No en cambio ella que por más que intenta aparecer como una madre preocupada, tiene una distancia, una frialdad propia de su belleza, que no es más que eso, una mujer hermosa pero fría, enigmática, pero mala actriz. Él en cambio que supongo que también será guapo, tiene una forma de sonreír, de mirar al mundo, de mirarla a ella, como si realmente estuviera coqueteando, como si realmente fuera un homme enamorándose de et une femme.
Me alegro mucho haberme dado el permiso, la osadía, el valor, de verla nuevamente, entenderla completamente, verla sin ilusiones, con mucho amor, con toda la ilusión pero aunque con miedo, dejar que mis ojos se llenaran de ella y quizás sufrieran alguna decepción, pero nada de eso ocurrió. De ahora en más cuando escuche el soundtrack, recordaré mucho más cada escena, cada momento, las escenas de la lluvia cayendo por el vidrio del auto y él pensando en ella o ella a su lado, escuchando música.
Totalmente recomendada!!

SINOPSIS:
Anne es una joven viuda que tiene una hija pequeña y cuyo marido murió durante el rodaje de una escena peligrosa. Ella también trabaja en el mundo del cine. Jean-Louis Duroc es también un joven viudo que tiene un hijo de corta edad; es un hombre más bien triste e introvertido.

CALIFICACION:
*************************

FICHA TECNICA:
Título original: Un homme et une femme, 1966, Francia.
Dirección: Claude Lelouch.
Guión: Claude Lelouch y Pierre Uytterhoeven.
Música: Francis Lai.
Fotografía: Claude Lelouch.
Género: Drama, romance.
Duración: 102 minutos
Reparto: Anouk Aimée, Jean Louis Trintignant, Pierre Barouh, Valérie Lagrange, Simone Paris, Paul Person.