Ya que si bien la ví y disfruté, no entraba para nada, dentro del género dramático que pensé era su esencia, no vamos a decir que es una comedia, porque sería una exageración. Ya que esta es una historia curiosa que para quien la mira sin demasiado detención, puede transformarse en un sin fin de cabos sueltos. Pero creo que en realidad LE CHAT ET LA SOURIS, es una sátira. Una sátira a los tiempos (1975), que se vivían en Francia, país de origen del director.
O sea partamos nada más por el nombre de la cinta ¿qué película dramática, de amor, histórica, aguanta un título así? Es evidentemente que el título invita a persecuciones. Persecución de un gato a por un ratón, o quién sabe, quizás sea un ratón habilidoso que persigue a un gato más tontillo.
Otro detalle que suma a esta seudo comedia o sátira, son los personajes principales, el Inspector Lechat y su oficial. Los dos tienen unas caras, expresiones particulares. Uno podría pensar que el Inspector tiene una mirada quizás un poco tristona, pero al paso de los acontecimientos veremos que más bien es el picarón mayor entre los de su especie. Es un caballero, un galán, trae locas a las mujeres y también a las jovencitas. Para todos lados lleva a su oficial, son amigos muy amigos, comparten el trabajo y la crianza de Sam, el perro policía del inspector que va para todos lados con ellos y del que se pretende sea un perfecto perro, que ladre cuando le piden, ataque y defienda en las mismas condiciones, la patita no se la pedirán. También es un ser humano, ahí podríamos pensar que el director hace un honor y gloria a la literatura al tema, como Inspector Maigret, que marca la diferencia en detectives que no solo están para resolver casos, sino que también piensan, sienten y les pasan cosas. En ese sentido, el Inspector Lechat, está separado, tiene algunas novias, vive solo en un departamento hasta que su hija llega porque a terminado su relación. Entonces el inspector se siente responsable de ayudar a enmendar la ruta de su filia y que consiga un hombre bueno a gusto de los dos. lo que se dice "un marido decente".
El inspector también saca un poco de provecho con los casos que resuelve, una tajada diría en América Latina, pero como bien dice: "permitido es llevarse una parte, entre él y su oficial, pero nunca todo, porque lo fundamental es no dejar el trabajo desprolijo". Es decir, nadie está libre de culpa, pero tampoco pensar que son todos ladrones y corruptos, ya que conocido es por todos, que los sueldos de los policías e inspectores no es alto, como tampoco lo será la jubilación. Entonces si se es precavido, mejor es ir ahorrando de forma independiente para la vejez.
Así es como a este inspector, lo ponen a la cabeza para descubrir ¿quién mató realmente al señor Richard? Además de encontrar a los ladrones de las obras de arte que hurtaron de la casa del occiso, que según el inspector, si encuentran las obras y al ladrón, tendrán al asesino. Aunque las primeras pistas del caso, entregadas por el médico forense, es que el occiso se suicidó, pero eso es irrisorio ya ¿cuáles serían los motivos para que un hombre que lo tiene todo, quiera suicidarse? Más bien habría que sospechar de la esposa, reciente viuda, ya que es la única heredera y se sabe por ahí que el marido, quería separarse para contraer nupcias con su "nuevo amor".
Ahí es cuando nuevamente Lelouch, le hace un nuevo honor y gloria al cine francés en este caso, ya que la esposa y reciente viuda del occiso, es nada menos que Michéle Morgan, que la verdad no tenía idea quién era, hasta que vi el documental sobre las películas del director y me enteré que esta mujer, es nada menos que la musa del cine francés de los años ´40. Tanto es así que estuvo a un pelo de transformarse en la dama co protagonista de Humphrey Bogart, en "Casablanca". O sea una joyita, de hecho mi sisterma Manucita, me contó que a mi paire le encantaba, la amaba. Y si bien los años no han pasado en vano, es una mujer elegante y hermosa todavía y en ese umbral quedará por siempre jamás, ya que el año pasado murió.
Otro detalle que puede ser una ironía o un destelledo del cine francés, una referencia, es el personaje de la amante del señor Richard, quién casualmente ¿casualidad? Lleva por nombre Manuelle ¿a qué les suena? Obviamente que a "Emanuelle". Una mujer desparpajada, que al estar frente a hombres, se muestra más que relajada, tanto que sus piernas no se juntarán por nada del mundo. Y si podemos verla en acción, ya que es actriz y casualmente de un cine seudo artístico que porno, los vellos púbicos de la dama, saldrán a escena sin ningún problema y con algún hombre o mujer, rozándola, tocándola, sobándola.
Así es como vamos avanzando y el tiempo transcurrido en LE CHAT ET LA SOURIS, nos aporta y enseña muchas cosas. El único pero que uno podría tener con esta cinta, pero que en realidad no lo es, es el tiempo que se toma Lelouch para contar la historia. Entre la cantidad de historias aledañas, que alguno pensará que son vías alternativas que distraen la atención y no vienen al caso, No, usted está muy equivocado, Lelouch, nunca pone nada, nada, nada, al azar. Quizás peque de querer contar demasiadas cosas en una misma historia, pero tiene la gracia o maestría, que cuando uno siente que ya está alargándose, la historia toma un giro inesperado o se acerca el fin, dejando a la película como una grande y entretenida, además de particular.
Ya que no son pocas las tareas que tiene el Inspector Lechat, no sólo debe descubrir al asesino que según él es la esposa recientemente viuda, sino que también atrapar al ladrón, que aparentemente no es la viuda y cual si fuera poco, también tiene que atender temas domésticos, como encontrar pareja para su hija y entrenar a Sam, pero el ítems de la hija lo soluciona de un paraguazo, ya que elije como yerno a su compañero de trabajo y mejor amigo y compinche. Además que por un momento será destituido del cargo y dedicará el tiempo a la vida en el campo, se irá a vivir con la novia joven, dedicándose a ordeñar vacas y a escribir. Escribir la que podría ser su gran novela policial, ya que en ella va detallando todas las ideas y suposiciones, que irán transformándose en las claves para desentrañar el caso del asesinato del Señor Richard y el robo de las obras de arte.
De las características que podríamos decir son propias del cine de Lelouch, para mí, son: las imágenes de un París ya sea de los ´60 o ´70 muy distinto al de hoy y sin embargo no por ello pierde frescura en el tiempo; los colores del film, casi siempre blanco y negro, tonos pasteles o algo de color, pero en los menos; la banda sonora, siempre suave, ligera, hermosa, cautivante, que se acomoda muy bien a las escenas tanto así que uno sabe que de no existir, todo sería más plano, sin mátices. Por si no lo sabía el compositor de las cintas de Lelouch, fue siempre, Francis Lai; no podemos dejar de lado la velocidad. Velocidad sobre ruedas, ya sean estas de auto o moto, también se aceptan botes, yates, barcos. No podemos dejar fuera a la estética. Un elemento persitente en el cine de Lelouch, nada al azar, todo siempre muy pensado tanto en el caso de las mujeres elegidas, hermosas, de ojos bellos, mirada ídems, o los espacios "escenografía", fueran estos el mar, campo, ciudad, hermosos detalles que producen el dejarte sin aliento. Todos estos elementos que unidos, hacen del cine del director en cuestión, alg inolvidable, pese a todos los peros que le podamos encontrar a los diversos films.
En el caso de LE CHAT ET LA SOURIS, hay que decir que el personaje del inspector Lechat, es encantador o al menos a mí me lo pareció. Si el título en español, le hiciera justicia, diría que el ratón es él, pero un ratoncito encantador, con mucho olfato, más vivaracho y sagaz, que va tras la captura del gato, que se cree hábil y será atrapado en el intento.
Y es que con un ratoncito como el Inspector Lechat, no se puede más que morir de amor, encantamiento, adoración. Y el actor bajo ese rótulo es Serge Reggiani. Y les contaré que a él también Lelouch, le hizo un homenaje al ponerlo en esta cinta, porque aunque fuera hecha hace 42 años, Reggiani, es un actorazo de aquellos, tanto como Michéle Morgan, llevan en la memoria más de diez títulos de cintas protagonizadas o en las que trabajaron. Y en el caso de Serge, además le sumamos el detalle no menor que baila y canta.
Porque Reggiani, se las traía, ya que el hecho no menor de Lelouch, de elegirlo a él como inspector Lechat y que trabaja con su perro Sam, no es casual, sino más bien un recordatorio de aquel film de 1963, que hiciera junto a Jean-Paul Belmondo, bajo la dirección de Jean- Pierre Melville, que se llamó "Le Doulous". Una thriller negro ¿qué tal? Y para ahorrarles el viaje al buscador, mencionaré algunas en las que trabajó y que yo le vi: El gatopardo deVisconti, Los aventureros, La hora 25, Le bon et les méchants también de Lelouch, La terraza de Etore Scola, Ill Volo de Theo Angelopoulus, I Hired a contract killer de Aki Kaurismäki. O sea en las que no participó o las que no vi, deben haber sido dos. Es decir, LE CHAT ET LA SOURIS, es una joyita, en su especie.
Busquenla y disfrútenla.
Totalmente recomendada!!
SINOPSIS:
El Señor Richard, un rico industrial, es brutalmente asesinado en su apartamento de París. Una investigación se inicia para averiguar los detalles del suceso y desentrañar dicho misterio. El inspector Lechat, famoso por sus métodos, nada tradicionales, se hace responsable del caso y, nada más entrar, pone en tela de juicio hasta los hechos más seguros, como la coartada de la señora Richard, que aparentemente es invulnerable. Otros sospechosos se unen a su lista, tales como la maestra de la víctima y un agente de seguros.
CALIFICACION:
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FICHA TECNICA:
Título original: Le chat et la souris, Francia, 1975.
Título en español: El gato y el ratón.
Dirección y guión: Claude Lelouch.
Música: Francis Lai.
Fotografia: Jean Collomb.
Género: Drama, comedia, intriga.
Reparto: Michéle Morgan, Serge Reggiani, Philippe Léotard, Jean-Pierre Aumont, Valérie Legrange, Michel Peyrelon, Christine Laurent, Philippe Labro, Jacques Francois, Arlette Emeery, Anne Libert, Vernon Dobtcheff.
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