27 de enero de 2011

LYMELIFE

Me encantan las películas como LYMELIFE, en donde el protagonista es un chico, bien adolescente o de corta edad, que tiene la mirada más sensible y madura de todos los personajes y que por lo general es altamente atractivo, aunque los que lo rodean todavía no caen en cuentas.
Aquí trata de las vivencias de Scott (Rory Kulkin), un joven de 15 años que observa con gran sabiduría cómo su familia y la de su mejor amiga, se desmorona lentamente.
La película podría haber estado contada al estilo de las gringas cintas de los años ´70 y ´80 donde cortarse las venas y hacer catársis colectiva era lo que se llevaba, al más puro estilo de "Gente como uno", "La fuerza del cariño", que siempre había un moribundo en visperas y por supuesto una familia que parecía funcional y que más bien era todo lo contrario.

En el caso de LYMELIFE, si bien hay un enfermo en visperas de quizás morir, se cuenta con dos familias disfuncionales, con un papá que gusta de la mujer del amigo, hijos que se van a vivir lejos de la chimuchina hogareña, si bien cuenta con todos los ingredientes para el más autentico dramón, la narración es totalmente distinta. El drama está ahí todo el tiempo presente y a sabiendas que quizás podría quedar la "tendalá", pero como estamos ante la visión de un chico de 15 años, todo se equilibra con el arte de la ironía, de lo que parece cómico y uno se ríe pero no es nada gracioso. De hecho está señalada como comedia, lo cual ya es demasiado, porque carcajadas nunca salen.

Pero LYMELIFE suena más a "Las aventuras de Igby" o "Little miss sunshine" o "Una serie de eventos desafortunados", donde los jóvenes con su simpatía y encanto se comen la historia con pies y uñas.
En este caso, Scott es un joven nada atormentado, que sueña con algún día tener los huevos para declarársele a su mejor amiga y en el camino del despertar sexual (que en Estados Unidos despìertan harto temprano), tendrá que enterarse de algunos baches familiares que desconocía.
El actor que interpreta a Scott, es nada menos que el o uno de, los hermanos menores de Macaulki Culkin, quien le diera vida al insoportable personaje de "Mi pobre angelito", pero que después cuando fue un poquito  mayor y le puso harto aderezo a su vida, tornose hacia el cine arte y le conocimos otras facetas mejores. Y pues hay que decir que a los padres de los Culkin, deberían premiarlos por los maravillosos genes que se gastan, esa piel extra blanca-transparente, el pelito rucio a rabiar, esos ojos enormes y azules y qué decir de la boquita carnosa y roja que todo el rato dan ganas de comerselos.

Scott me robo el corazón todo el tiempo que duro la cinta, porque era hermoso, tierno, amoroso, digamos que volvería a nacer si alguien me asegura que mi despertar sexual, va a estar en manos de esta preciosura sensible............ nos desojariamos a placer.
Totalmente recomendada!!


SINOPSIS:
La cinta ambientada en Long Island a fines de los años setenta, cuenta la relación de dos familias con sus probelmas afectivos y económicos, vistos por Scott,un chico de 15 años.


CALIFICACION:
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FICHA TECNICA:
´Título original: Lymelife, Estados Unidos, 2010
Titulo en español: Aprendiendo a vivir

Dirección: Dereck Martini
Guión: Dereck Martini y Steven Martini
Genero: Comedia
Reparto: Rory Culkin, Alec Baldwin, Jill Hennessy, Emma Roberts, Timothy Hutton, Cynthia Nixon, Logan Huffman
Premios: Critica en el Festival de Cine de Toronto.

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